Incluso los niños que no tienen síntomas pueden transmitir la enfermedad. El COVID-19 puede transmitirse fácilmente de persona a persona, y las personas no tienen inmunidad preexistente. Sin controles, una gran proporción de la población podría infectarse en cualquier área donde circule el virus. En las áreas donde se producen grandes brotes, el sistema de salud puede verse abrumado, lo que implicaría una tasa de mortalidad creciente para COVID-19, así como un aumento de las muertes por todas las causas. Por lo tanto, la gravedad de la situación requiere que las comunidades hagan lo que pueden para limitar la transmisión, incluido el cierre de escuelas si es necesario. Fuente: La conversación

Fuente: La conversación